lunes, 2 de febrero de 2015

Luz, color y sabor en la celebración a la Virgen de la Candelaria en Tlacotalpan

Ángel García
Tlacotalpan, Veracruz 

La música, la alegría, la gastronomía, el calor humano y, sobre todo, la fe, desbordan por las calles de Tlacotalpan durante las festividades en honor a la Virgen de la Candelaria, santa patrona de este pueblo que ríe y canta.
“La Perla del Papaloapan” se distingue por su gente cordial y amable, lo que hace de Tlacotalpan un lugar placentero para el turismo.
Tlacotalpan tiene sus puertas abiertas para recibir a todos los que quieran contemplar su arquitectura, sus costumbres, conocer su historia y sus tradiciones. Su belleza natural no tiene comparación y como marco principal tiene al río Papaloapan.
La fiesta sigue en este municipio, donde se habla de la presencia de más de cien mil visitantes que durante los últimos días han llegado de diversas partes del mundo para disfrutar de estas antiguas festividades.
El estallido de los cohetones que surcan los aires se escuchan durante todo el día y con él se hace un llamado a los presentes para no olvidar el motivo central de estas fiestas: la Virgen de la Candelaria.
Las festividades terminarán el próximo 9 de este mes, mientras tanto, las calles de Tlacotalpan, Patrimonio Cultural de la Humanidad, lucen repletas de personas que no han dejado de bailar, de cantar y de disfrutar la amplia gastronomía que “La Perla del Papaloapan” ofrece para todos los gustos.
Los foros de presentaciones editoriales, los encuentros de jaraneros y decimistas, las regatas y el tradicional embalse de toros, fueron esperados con ansia por una multitud que también ha quedado maravillada por los portales y los colores que adornan cada una de las casas de este pintoresco lugar.
Por tratarse de un fin de semana largo los visitantes se encuentran confiados de disfrutar a plenitud todas las actividades, en especial del tradicional paseo de la imagen de la Virgen de la Candelaria sobre las aguas del Papaloapan programado para las 15:30 horas de este lunes 2 de febrero.
El Santuario de la Candelaria tiene actividades de manera permanente, los rezos, las misas y las oraciones se llevan a cabo desde antes del amanecer. El templo luce siempre repleto de creyentes que acuden a dar gracias y a pedir milagros a su santa patrona.
Los foros culturales y artísticos atraen con facilidad la atención de un sinnúmero de visitantes, quienes al ritmo de las palmas de sus manos aplauden para reconocer el talento y de todas las bellezas que Tlacotalpan comparte con el mundo.
La identidad de este pueblo, su tradición y su folclor, han sido suficientes para reunir a familias enteras que con satisfacción disfrutan del son jarocho y del baile que puede desarrollarse en cada uno de los rincones de “La Perla del Papaloapan”.
Las lunadas son otro atractivo de estas festividades, pues aquellos que no alcanzaron cuartos de hotel tuvieron que recurrir a improvisados campamentos colocados sobre las banquetas. Algunos, los más afortunados, lograron un lugar cercano al río Papaloapan y todos disfrutan plácidamente de la luz de la luna y de los primeros rayos del sol al amanecer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario